En estos últimos días he podido recordar una película española que tuve la oportunidad de poder ver en el cine en cuanto se estrenó. Por aquél entonces yo era de los que pensaba que el cine español era deficiente y que no se apostaba fuerte por ningún género en concreto. Además, me parecía aburrido y de argumentos y guiones planos así como poco presupuesto y acción.
Todos estos "tópicos" que ya se podrían definir así porque muchísima gente lo piensa o lo llegó a pensar sin siquiera adentrarse correctamente a las producciones españolas importantes o no tan importantes pero donde hay un gran trabajo detrás, se rompen.
Tras esta película levanté la cabeza y descubrí que el género de terror iba a tener una gran repercusión en las producciones españolas y de hecho, tras El orfanato llegaron grandes producciones entorno a este género y el thriller muy interesantes y que han tenido mucho éxito como REC, Los Ojos de Julia, Celda 211, Mientras duermes, Mamá... y es entonces cuando comencé a investigar y encontré producciones como La habitación del niño, Frágiles y La monja por ejemplo donde pudo contrastar que parece se nos da bien la mezcla del thriller psicológico y el terror.
Argumento:
Laura vuelve al orfanato donde se crío de niña con el objetivo de abrir una residencia para niños discapacitados. El ambiente del lúgubre lugar despierta la imaginación de su hijo, que empieza a dejarse arrastrar por la fantasía. Los juegos y actitud que adopta el niño inquietan cada vez más a su madre que empieza a sospechar que en la casa hay algo que amenaza su familia.
Crítica:
Romper con lo esperado y crear tensión dejándonos esperar el momento en el que recibir el susto son los elementos claves que nos enganchan a la historia. El papel de la protagonista (Belén Rueda) es sin duda otro de los elementos fundamentales por los que esta película ha funcionado puesto que su papel e interpretación encajan perfectamente con el personaje.
Nos encontramos en un escenario algo típico en las películas del género pero como he comentado anteriormente no sólo hablamos de terror sino que la historia que se encierra en las paredes del orfanato va más allá y nos adentra en un thriller que se desarrolla de manera ordenada pero al mismo tiempo permitiéndonos enlazar conceptos y sucesos poco a poco manteniendo la intriga y el suspense prácticamente hasta el final del filme donde por fin comprenderemos qué es lo que está sucediendo.
Existe un estupendo trabajo con los elementos conductores del film puesto que son claves en él la existencia del hijo de la protagonista y los juegos que éste emplea para seguir el rastro (y nunca mejor dicho) a lo que ocurre. Los juegos de niños relacionan la historia con el ambiente en el que nos encontramos y los giros psicológicos de la protagonista llaman la atención en tres momentos claves para descubrir lo que sucede.
Finalmente, no olvidaré decir que lo más impresionante y emotivo de esta película es el final que nos presenta y puesto a ser una película que se lanza bajo la etiqueta del terror, el suspense, la intriga, la fatiga, los nervios y la ansiedad son los adjetivos que pueden definirla correctamente explotando en un desenlace lleno de ternura que nos dejará reflexionar durante un momento sobre todo lo ocurrido en la película.
Sin duda una película cargada de sentimientos y momentos de incertidumbre que mezclados con la tensión y el ambiente tenebroso en el que se desenvuelven los acontecimientos, nos transportan a un nuevo mundo junto a los niños del orfanato.
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